martes, 10 de julio de 2007

LA CONSCIENCIA DEL SER

Hermanos míos, se han dado cuenta, han tomado consciencia que al descubrirnos desarrollando el Poder Consciente para cambiar hábitos, acciones, situaciones, también debemos tener en cuenta su aplicación.
Así, lentamente se irá revelando el gran misterio en su perfecta simplicidad y propósito que subyace fragmentado en lo profundo de nuestro interior, ¡que somos temporariamente separatividad!
Así el Todo, Padre Creador, el Profundo Amor, se recrea en su Divina Unicidad y Totalidad a la cual, como destino inexorable, un día del tiempo nos uniremos.
¡Que maravillosa Tríada dializada para consumar desde dentro hacia fuera el despertar! Conciente de la relación con los planos en el mundo material, nuestro cuerpo material se expresa y recrea como mineral. Somos un promedio de 70 u 80 % sales minerales… Somos primera dimensión.
En el plano astral somos plantas, recreando la naturaleza. Nos expresamos sensorial, emotiva e intuitivamente.
A nivel mental, nosotros somos seres humanos en cuarta dimensión; interactuamos con Guías, Ángeles, necesitamos ese interactuar consciente para cuidarnos y cuidar a otros desde ese plano. Así vamos descubriendo los mecanismos y estados del ser que coexiste en nuestro interior.
Pero tales expresiones integrales nos permitirían descubrir que el verdadero enemigo, la oscuridad, está dentro de nosotros y le alimentamos con nuestros pensamientos negativos, que crean causas cuyos efectos se expresan en nuestros cuerpos astral y emocional y que hereda nuestro organismo.
¿Por qué es necesario asumir, purificar nuestra mente? Para que nuestros pensamientos positivos renueven y equilibren nuestras emociones y así, conscientes, elevar las vibraciones de nuestro vehículo material en la Tierra.
Es momento de darnos cuenta que solamente el conocimiento nos puede sacar de ese sueño profundo, cómodo y seguro que es la ignorancia, haciéndonos dar cuenta que la “tercer guerra mundial” o la “gran batalla del Armagedón”, la que concluirá con todas las batallas, se está expresando en nuestro interior, en “nuestra mente” y ella concluirá con la creación de la Consciencia Única de la Humanidad. El Amor activo y vivo finalizará con todas las expresiones bélicas y ello acontecerá cuando las fuerzas del Amor del Cristo renazcan en cada corazón, en el de aquellos que fueron capaces de abrirlo por Amor al prójimo.
El “Salvador de la Humanidad” somos todos y cada uno de nosotros, la misma Humanidad. El esclarecimiento y el conocimiento nos ayudarán a construir puentes entre todos y todos poder construir desde nuestras oscuridades un puente hacia la Luz de la Verdad, que es el Profundo Amor.
La Paz sea en mis hermanos todos.

Carlos Fernández

No hay comentarios: